El gobierno de Estados Unidos anunció este martes que 29 niños migrantes serán reunidos con sus familias tras haber sido separados bajo la política de "tolerancia cero" del expresidente Donald Trump, aunque cientos de menores siguen apartados de sus padres.
El secretario del Departamento de Seguridad Interior (DHS), Alejandro Mayorkas, enfatizó el compromiso del gobierno de Joe Biden con la reunificación de las familias que fueron "cruelmente separadas" por la administración anterior.
Cuando reunimos a las primeras siete familias el mes pasado, dije que esto era solo el comienzo. En las próximas semanas, reunificaremos a 29 familias más", dijo Mayorkas, quien preside un grupo de trabajo para la reunificación familiar, en un comunicado.
El DHS indicó que se ha identificado a 3.913 niños separados de sus familias en la frontera entre Estados Unidos y México entre el 1 de julio de 2017 y el 20 de enero de 2021.
De ese total, "hay 2.127 menores para los que el Fuerza de Tareas no tiene un registro confirmado de reunificación", señaló.
Hasta ahora, 1.786 menores fueron entregados a sus familias, 1.779 gracias al apoyo de oenegés y otros siete en los últimos 30 días.
"La Fuerza de Tareas espera que el ritmo (de las reunificaciones) aumente a medida que se implementen los procedimientos", según el DHS.
El legislador demócrata Jerrold Nadler, presidente del Comité Judicial de la Cámara Baja del Congreso, y la legisladora Zoe Lofgren saludaron los avances, pero dijeron que se necesitan mayores esfuerzos.
"Este informe inicial publicado por la Fuerza de Tareas deja en claro que se están dando pasos importantes para mitigar el daño inconmensurable que resultó de la cruel política de separación familiar de la Administración Trump", señalaron en una declaración.
"Sin embargo, se debe hacer mucho más para garantizar que todos los niños se reúnan rápidamente con sus padres o tutores legales en los Estados Unidos", apuntaron.
Antes de asumir el cargo, Biden prometió implementar una política de inmigración más "humana" y revertir la dura postura adoptada por su predecesor hacia los inmigrantes indocumentados.
Para esto, encomendó a la vicepresidenta Kamala Harris liderar los esfuerzos diplomáticos para abordar las causas de la migración irregular en México y el Triángulo Norte centroamericano (Guatemala, El Salvador y Honduras), origen de la mayoría de las personas detenidas sin papeles al cruzar la frontera sur estadounidense.
Harris se encuentra el martes en México para tratar el tema, tras una primera parada en Guatemala.
El número de detenciones de indocumentados, incluidos menores no acompañados, batió un récord de 15 años en abril en la frontera entre Estados Unidos y México. De las más de 178.600 personas interceptadas, el 82% provenía de México y el Triángulo del Norte.